Un Padre Cabal
Un Padre Cabal.
Este fin de semana estamos celebrando el día del padre. Y antes de continuar predicando, quiero tomarme el tiempo para felicitar y honrar a los padres aquí presentes. Su trabajo es muy importante! ánimo, sigamos siendo padres!!! démosle un aplauso fuerte a los padres.
Y precisamente por estar celebrando el día del padre hoy les quiero compartir acerca del corazón paternal de Dios, mi mensaje se titula Un Padre Cabal.
Vamos a empezar leyendo un fragmento de la escritura:
1 de Juan 3:1 1 Mirad cuál amor nos ha dado el Padre, para que seamos llamados hijos de Dios; por esto el mundo no nos conoce, porque no le conoció a él. 2 Amados, ahora somos hijos de Dios…”
En la memoria colectiva de todas las culturas antiguas se encuentra el recuerdo de que hay un Dios sobre todo y sobre todos. Sin embargo, el concepto de ese Dios, era como de un ser distante y hasta enojado. De hecho, los sacrificio y ofrendas presentadas a ese Dios o a los dioses antiguos, siempre tenían el objetivo de aplacar la ira o conseguir su favor. Quizá en los mas profundos recuerdos en el interior de los antiguos, estaba el suceso de la caída y la desobediencia del hombre, el cual perdió todo privilegio ante Dios a causa de su pecado. Por eso, el regalo mas grande que el judaísmos y el cristianismo le han aportado al mundo es el poder concebir a Dios como un ser cercano y con el anhelo de relacionarse con los seres humanos. El judaísmo y el cristianismo presentan a Dios como un ser que ama, y que desea tratar personalmente con nosotros y lo hace como un padre con su hijo.
Ser hijos es una de las bendiciones más grandes que tenemos en la vida. Por el simple hecho de ser hijos tenemos derecho y tenemos acceso a innumerables beneficios. Por ser hijos puedes disfrutar los bienes del padre, por ser hijo puedes recibir herencia, y por ser hijo puedes acceder a la intimidad con el padre. Imagínate entonces lo que significa ser hijos de Dios.
El fragmento que iniciamos leyendo nos deja verte de una forma muy palpable. leámoslo de nuevo:
1 de Juan 3:1 1 Mirad cuál amor nos ha dado el Padre, para que seamos llamados hijos de Dios; por esto el mundo no nos conoce, porque no le conoció a él. 2 Amados, ahora somos hijos de Dios…”
Tu y yo al estar en Cristo escalamos a un grado de mayor intimad con Dios: dejamos de ser tan solo creación, para llegar a ser hijos de Dios. Y esto no obedece a un mérito ganado o alcanzado por nosotros sino al gran amor de Dios. Por el amor de Dios es que tu y yo podemos tener una relación mas íntima con el. Y dice:
“…ahora, somos hijos de Dios…”
Antes no, ahora si. Ahora en Cristo somos hijos de Dios.
Entonces, en Cristo nos podemos relacionar con Dios como hijos no solo como creación.
Para valorar el ser hijos de Dios, se requiere tener muy clara la bendición de ser hijos, y se requiere tener muy clara también la imagen de lo que es un padre. Porque cuando un hijo tiene distorsionada en su mente y en su corazón la imagen del padre se pierde todos los beneficios a los que tiene derecho. Porque al saber que Dios es su padre celestial y al tener distorsionada o manchada la imagen de un padre, no le representaría ningún gozo el saber que Dios es su padre celestial quizá le representaría indiferencia, miedo, o enojo. Por el concepto equivocado de Padre que hay en su mente.
Por eso al que le toca representar al padre, tiene una enorme responsabilidad: representar bien a Dios.
Ahora cuando el hombre que es padre tampoco tiene muy claro lo que implica su paternidad, podría ser el causante de distorsionar en la mente de sus hijos lo que es un padre verdadero y eso a la larga afectaría la relación que sus hijos pudieran tener con Dios.
A lo largo de toda la Biblia podemos encontrar que Dios escogió rebelarse a nosotros como Padre. Precisamente por todo esto es que Satanás se ha encargado de empañar y distorsionar la correcta imagen de un padre, porque al hacerlo distorsionará la imagen de Dios. Y después eso afectará nuestra relación con Dios y perderemos privilegios y bendiciones a las que tenemos derecho por ser hijos de Dios.
Si queremos aprender con exactitud lo que es un padre, y a la vez valorar la bendición de ser hijos, debemos observar la paternidad de Dios revelada a nosotros a lo largo de toda la escritura y así se desarrollará una correcta imagen de lo que es la paternidad. quiero encerrar este concepto en una frase:
La paternidad de Dios revelada en su palabra, nos da una imagen cabal de lo que es un padre.
Cabal significa: Que es exacto y coincidente y no aproximado.[1]
¿Como es un padre cabal según lo aprendemos de Dios mismo?
Un Padre que ama.
Una característica de un padre cabal es el amor, sentido y expresado. Un verdadero Padre ama y expresa su amor. Esto lo aprendemos de Dios. Miremos la escritura:
Oseas 11:1 1 Cuando Israel era muchacho, yo lo amé, y de Egipto llamé a mi hijo.
Si no hay amor, no hay paternidad, solo procreación.
En este fragmento vemos un padre amante. Aunque el profeta Oseas está haciendo referencia al pasado, cuando Israel salió de la esclavitud en Egipto, también es un fragmento profético que se refiere al momento cuando Jesús regresaría de Egipto a Israel después de que Herodes murió. Pero en cuanto a la paternidad de Dios aprendemos que el padre cabal ama a sus hijos.
Algunos sentirán que este aspecto es muy obvio, argumentando que todos los padres aman a sus hijos. Que el amor de los padres a los hijos es intrínseco en la paternidad. Yo no me atrevería a decirlo así dados los millones de casos de abandono por parte de los padres.
Por otro lado, según lo que acabamos de leer, el padre acaba ama a sus hijos y los acerca a el. El amor de un padre cabal se manifiesta en el deseo de cercanía. El fragmento dice: Yo lo amé, y lo llamé.
El verdadero amor debe manifestarse con el deseo de la relación y de la cercanía: ¿Quieres que tus hijos sepan y sientan que les amas? No los ames a la distancia: Acércalos a ti. Acércalos a tu corazón. Acércalos a tus criterios, comparte con ellos tus ideas, tu corazón y tus sueños, hazles sentir parte de lo que hay dentro de ti. Interésate por apoyarlos y hacerles saber que allí estas tu y siempre estarás. De esa manera ellos interpretarán que los amas.
Otro fragmento mas que nos deja ver el amor de Dios como padre es este:
Jeremías 31:3 3 Jehová se manifestó a mí hace ya mucho tiempo, diciendo: Con amor eterno te he amado; por tanto, te prolongué mi misericordia.
Esto es importante. A veces los hijos nos dan motivos para que nos enojemos con ellos. Nuestro amor debe ser mas grande que nuestro enojo y que los motivos que nos dan para enojarnos. Debemos estar dispuestos a prolongar la misericordia y perpetuar nuestro amor a nuestros hijos, tal como Dios lo ha hecho con nosotros.
Un adre cabal ama a sus hijos y los acerca.
¿Como es un padre cabal según lo aprendemos de Dios mismo?
Un Padre que acompaña.
En la vida hay temporadas difíciles. ¿Si o no? Hay momentos en que la mayor manifestación de amor a nuestros hijos es nuestra compañía. Mas que la provisión, mas que la afirmación, mas que el estímulo, mas que los regalos costosos, a veces lo que nuestros hijos necesitan es nuestra compañía.
Y respecto a este punto, La Biblia dice:
Isaías 41:10 10 No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.
Aquí aprendemos que Dios es un Padre que acompaña, que ayuda y que sustenta. Sustentar es sostener para que algo no caiga. Para ayudar y para sustentar hay que acompañar. NO podemos ayudar, ni sustentar, si no acompañamos.
Dios es un Padre que nos acompaña, que nos ayuda y que nos sustenta. Y lo hace porque nos ama. Y nosotros que somos padres, o que lo seremos algún día debemos hacer lo mismo.
Una necesidad enorme en el corazón de nuestros hijos es nuestra compañía como padres. Y debemos acompañarlos mientras nuestros hijos lo necesiten. No hay una edad exacta para dejar de acompañarlos, es hasta que ellos estén listos. A veces los paradigmas que traemos o la presión de los demás nos presionan para que dejemos de acompañar y que alejemos a nuestros hijos. a veces nos anticipamos, o nos apresuramos a desvincular de nosotros a nuestros hijos; pero si lo hacemos cuando ellos no están listos, los herimos o lastimamos. Lo que aprendo de la palabra de dios es: Acompaña a tus hijos mientras ellos lo necesiten. Cuando ya no lo necesiten aprovecha tu libertad.
Una vez Dios me dijo respecto de mi hijo: Acompáñalo mientras crece. Hoy entiendo porque, Dios quería que le mostrara a mi hijos lo que es un padre cabal, y sobre todo, como es el padre celestial. Un Dios que acompaña. Cuando tienes miedo, el te acompaña, cuando ya no puedes el te ayuda. y cuando sientes que te caes, el te sustenta. Un padre cabal acompaña a sus hijos como el padre celestial nos acompaña a nosotros.
¿Como es un padre cabal según lo aprendemos de Dios mismo?
Un Padre que Disciplina y Castiga.
Un padre que solo ama y no disciplina ni castiga, no es un padre cabal. Solo es un padre bueno, pero al mismo tiempo es un mal padre. El padre cabal ama, acompaña, ayuda, sustenta pero también disciplina y cuando se requiere también castiga. Así es Dios. veamos:
Hebreos 12:6 Porque el Señor al que ama, disciplina, Y azota a todo el que recibe por hijo.
Aquí se menciona la disciplina y al azote en relación al amor y la paternidad. Aquí aprendemos que la disciplina es una muestra de amor. Disciplina tiene que ver con entrenamiento para el desarrollo. Azote, o castigo, tiene que ver con corrección para erradicar una conducta.
¿Para que disciplinamos? Para preparar para la vida. Que es disciplina es aplicar cierto grado de presión sobre nuestros hijos mediante hábitos, responsabilidades, retos, constancia etc. lo hacemos porque queremos prepararlo para la vida.
¿Para que castigamos? Para erradicar una conducta. Disciplinar y castigar es parte de ser un padre cabal. Mira como lo plantea la escritura:
2 Samuel 7:14 14 Yo le seré a él padre, y él me será a mí hijo. Y si él hiciere mal, yo le castigaré con vara de hombres, y con azotes de hijos de hombres;
El castigo está relacionado con el hacer lo malo. Si tu hijo se equivoca lo corriges y le enseñas como se hacen las cosas correctamente. No se castiga por un error. Se castiga por una acto de maldad; por la manifestación de una conducta rebelde, o por una explícita desobediencia, pero no por un error.
El castigo no es para reforzar una conducta o un hábito; es para erradicarlo.
No temas ejercer la disciplina y el castigo. Es parte del amor. No castigues enojado, nunca lo hagas bajo el influjo d la ira. NO castigues sin explicación, el hijo siempre debe saber que se debe el castigo para que lo asocie con la conducta que debe abandonar.
¿Como es un padre cabal según lo aprendemos de Dios mismo?
Un Padre que perdona y restaura.
Dios es un Padre que cuando nos arrepentimos nos perdona y nos restaura. Y el espera que nosotros hagamos lo mismo. Hay padres que castigan cuando los hijos hacen mal, pero no celebran cuando caen el bien.
También hay padres que castigan, pero no levantan el castigo; los hijos sienten el castigo pero nunca sienten el perdón. Nuestros hijos deben sentir el castigo y también deben sentir el perdón. ¿Cuando se debe manifestar el perdón? Cuando el hijo manifiesta el arrepentimiento.
El arrepentimiento es la señal de que un hijo esta listo para el perdón y la restauración.
Los padres no debemos anticiparnos al perdón y la restauración, debemos esperar hasta que haya arrepentimiento. Si perdonamos antes de que se arrepientan, violentaremos un ciclo natural en las relaciones. Y ellos no se desarrollaran cabalmente.
La mejor historia que nos deja ver al padre que perdona cuando el hijo se arrepiente, es la historia del hijo pródigo veamos:
Lucas 15:18-24 18 Tengo que volver a mi padre y decirle: Papá, he pecado contra el cielo y contra ti. 19 Ya no merezco que se me llame tu hijo; trátame como si fuera uno de tus jornaleros”. 20 Así que emprendió el viaje y se fue a su padre. »Todavía estaba lejos cuando su padre lo vio y se compadeció de él; salió corriendo a su encuentro, lo abrazó y lo besó. 21 El joven le dijo: “Papá, he pecado contra el cielo y contra ti. Ya no merezco que se me llame tu hijo”. 22 Pero el padre ordenó a sus siervos: “¡Pronto! Traigan la mejor ropa para vestirlo. Pónganle también un anillo en el dedo y sandalias en los pies. 23 Traigan el ternero más gordo y mátenlo para celebrar un banquete. 24 Porque este hijo mío estaba muerto, pero ahora ha vuelto a la vida; se había perdido, pero ya lo hemos encontrado”. Así que empezaron a hacer fiesta.
Este fragmento se trata de como hay fiesta en los cielos cuando un pecador se arrepiente. Se rata de cómo Dios cual padre amoroso, acepta al hijo arrepentido y lo recibe con amor. Pero la historia nos permite ver que el hijo que hizo mal reconoce que hizo mal y determina volver con su padre a reconocer su falta y pedir perdón. Pero también podemos ver a un padre que perdona, y que restaura es decir, reubica a su hijo a su posición de autoridad. el padre le devuelve la confianza. aquí aprendemos que confiar en nuestros hijos es una decisión, no una situación. Siempre hay un riesgo de que los hijos vivan a fallar, pero este padre, se arriesgó a confiar en su hijo. Y esto sucedió cuando el hijo se arrepintió.
llamar al grupo de alabanza.
Quizá la imagen que tienes de un padre no es la correcta porque tu padre no modeló bien lo que es un padre cabal. Quizá tuviste un padre que solo te manifestó el amor, siempre tuvo regalos y dádivas para ti pero nunca te disciplinó. Y ahora te cuesta trabajo cuando una autoridad en tu vida: tu jefe, tus maestros, tus pastores y líderes te disciplinan. Dios quiere restaurar en ti la imagen de un padre para que ejerzas una paternidad cabal.
O quizá tuviste un padre que solo te disciplinó pero nunca te manifestó su amor. O te mostraba su amor con afecto, pero no te restauraba lo que perdías. etc. Todo esto nos afecta en nuestra imagen de lo que es un pare y en el como ejercemos nuestra paternidad.
Cantar.
Dios es un padre cabal y desea que en primer lugar lo conozcas como el verdadero pare que es.
Y en segundo lugar, si eres padre Dios espera que modeles a tus hijos lo que un verdadero padre es.
Y en tercer lugar, si tu corazón estas dañado por el abandono de tu padre, hoy descubras que Dios te ama, que el siempre está contigo. Dos te acompaña en todo tiempo, aún en las temporadas mas difíciles de tu vida. Dios te disciplinará para que seas una mejor persona; y si haces lo malo te castigará para que dejes tu mala conducta y lo hace precisamente porque te ama. Y si has perdido mucho por tu desobediencia, si te arrepientes, Dios te restaurará.
[1] https://www.google.com/search?client=safari&channel=mac_bm&source=hp&ei=06MBXZ9s4qvSAqGJkLgF&q=%C2%BFque+significa+cabal%3F&oq=%C2%BFque+significa+cabal%3F&gs_l=psy-ab.3…2032.8940..12022…0.0..1.109.2046.19j4……0….1..gws-wiz…..0..35i39j0j0i131j35i39i19j0i203j0i22i30.y23D7BlAeYc