La fuerza imparable
La fuerza imparable.
La semana pasada hablamos del hecho mas importante de nuestra fe: la resurrección de Cristo; la cual es el sello de validez del evangelio y confirma que Jesús es quien dijo ser.
Poco se habla de qué pasó después de la resurrección; casi siempre ligamos resurrección con ascensión. Pero el Dr. Lucas en el libro de los hechos nos muestra qué ocurrió entre la resurrección y la ascensión. El dice:
Hechos 1:1-3 1 En el primer tratado, oh Teófilo, hablé acerca de todas las cosas que Jesús comenzó a hacer y a enseñar, 2 hasta el día en que fue recibido arriba, después de haber dado mandamientos por el Espíritu Santo a los apóstoles que había escogido; 3 a quienes también, después de haber padecido, se presentó vivo con muchas pruebas indubitables, apareciéndoseles durante cuarenta días y hablándoles acerca del reino de Dios.
El primer tratado, es el evangelio de Lucas. Allí, en el evangelio, Lucas describe lo que Jesús comenzó a hacer y enseñar hasta el día de su ascensión.
Lucas dice que Jesús ascendió a los cielos, después de cuarenta días de apariciones en las que se presentó en carne y hueso con pruebas incuestionables de su resurrección; y dándoles mandamientos, e instrucciones sobre el reino de Dios a los Apóstoles.
Los discípulos de Jesús estaban a punto de enfrentar una nueva realidad: el cuerpo físico de Cristo, sería reemplazado aquí en la tierra por el cuerpo místico de Cristo: su iglesia. Serían los discípulos del Señor quienes impulsarían, en el poder del Espíritu Santo, la fuerza imparable de la iglesia en el mundo. Esos cuarenta días de instrucción eran cruciales.
Era de suma importancia para Jesús que los discípulos entendieran que la iglesia no es el edificio, somos las personas.
Era de suma importancia para Jesús que los discípulos entendieran que la salvación es por gracia, no por obras.
Era de suma importancia para Jesús que los discípulos entendieran que la iglesia funciona por el poder del Espíritu Santo no por nuestra capacidad humana; y que nada ni nadie puede, ni debe detener la fuerza imparable de la iglesia.
Por eso para Jesús eran tan importantes esos cuarenta días antes de la ascensión. De ello dependía que los discípulos fueran efectivos en la misión de llevar el evangelio a todo el mundo, pese a todas las circunstancias, superando todos los obstáculos y la persecución; adaptándose todas las realidades posibles; y dependiendo siempre del poder y de la guianza del Espíritu Santo. Por eso les dijo:
Hechos 1:8 8 pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra.
Este fragmento nos permite apreciar la fuerza imparable de la iglesia en dos sentidos: 1- Al utilizar la palabra griega Martyria para llamarnos testigos, Jesús sabía que habría momentos donde el evangelio solo se podría predicar poniendo la vida por delante; pero aún así el evangelio avanzaría. Y 2- Al trazar el avance expansivo de la iglesia en Jerusalén: en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra, estaba demostrando que el avance sería imparable. Hoy, por ejemplo estamos cruzando incluso fronteras virtuales y brechas generacionales. La iglesia es y ha sido por dos mil años una fuerza imparable.
Pero en este fragmento, Jesús establece una verdad poderosísima:
La Iglesia es una fuerza imparable, cuando el Espíritu Santo es su combustible.
El combustible de la iglesia no puede ser el edificio, ni los emotivos programas en las reuniones, ni nuestros sofisticados equipos. Hoy hemos tenido que replegarnos a nuestras casas y no por ello hemos dejado de ser la iglesia.
Si el Espíritu Santo es el combustible de la iglesia, nada detendrá su avance; porque los creyentes estarán dispuestos a ser mártires de esta causa, y estarán dispuestos a extender el mensaje hasta la última frontera conocida y a seguir siendo iglesia ocurra lo que ocurra en este mundo.
Esto explica porqué la iglesia ha prevalecido a los largo de dos mil años de historia, bajo todo tipo de ataques: políticos, ideológicos, internos, externos, económicos, sociales etc.
Estos dos mil años de historia comprueban que la iglesia es un fuerza imparable cuando el Espíritu Santo es su combustible.
Ultimamente, los cristianos de todo el mundo estamos enfrentando otra vez una nueva realidad: ahora, por un período de tiempo no es posible reunirnos físicamente; sin embargo, la iglesia sigue mas viva, mas presente y mas activa que nunca reuniéndonos virtualmente: somos una fuerza imparable, porque el Espíritu Santo es nuestro combustible.
Ante esta declaración, surge de manera muy natural esta pregunta:
¿Como podemos manteneros conectados con el Espíritu Santo para seguir siendo la fuerza imparable?
Se intencional en buscar al Espíritu Santo personalmente.
La Vida cristiana se mantiene encendida en la medida que cada uno vive su relación personal con Dios. Por eso dice el salmista:
Salmo 63:1 1 Dios, Dios mío eres tú; De madrugada te buscaré; Mi alma tiene sed de ti, mi carne te anhela; En tierra seca y árida donde no hay aguas,
Este fragmento nos permite percibir la importancia de una relación personal con Dios. Dice: Dios, Dios mío eres tu. Te buscaré. Mi alma tiene sed de ti. Mi carne te anhela.
Esto es clave, para mantenernos vivos espiritualmente: nuestra relación Personal con Dios.
Lamentablemente no todos han desarrollado el hábito de buscar a Dios de manera personal. Quizá porque el contacto y el vínculo con la congregación, al adorar juntos, al interactuar como lo hacíamos etc. Nos inyecta un aliento para seguir vivos.
Pero ahora que no tenemos esa experiencia, a muchos los ha dejado sin oxígeno espiritual y podrían asfixiarse.
En esta situación, quienes no han desarrollado el hábito de buscar a Dios por si solos, en la lectura y meditación de la palabra y en la oración corren el riesgo de enfriarse en su fe.
Familia, esta situación va a probar la supervivencia de nuestra fe.
Por eso, quiero animarlos como pastor, a determinar un tiempo en nuestro día para dedicarlo exclusivamente para buscar al Espíritu Santo en su palabra y en la oración; apartando un tiempo para estar a solas con el; antes de que despierte nuestra familia o después que se hayan acostado, o simplemente separándonos de todos para estar a solas con Dios en algún espacio de la casa o saliendo solos a caminar y buscar a Dios.
NO hablo de escuchar predicaciones, hablo de la lectura sola de la palabra de Dios y el orar a solas a Dios cada uno; esto es crucial para nuestra vida espiritual.
¿Como podemos manteneros conectados con el Espíritu Santo para seguir siendo la fuerza imparable?
Se intencional en buscarlo junto a tu familia espiritual.
La vida espiritual es personal, pero la vida cristiana se vive en comunidad.
Hechos 2:44-46 44 Todos los que habían creído estaban juntos, y tenían en común todas las cosas…46 Y perseverando unánimes cada día en el templo, y partiendo el pan en las casas, comían juntos con alegría y sencillez de corazón,
Quizá esta es la parte que mas extrañamos todos en esta cuarentena. Yo tengo nostalgia de poder verlos, y saludarlos y abrazarlos; cuando nos vemos en las reuniones de zoom, se experimenta una dosis de gozo, y eso ayuda un poco pero nada comparado con vernos en las reuniones en físico.
Esta parte de la vida cristiana, la vida en comunidad, está siendo atacada mas fuertemente. Y En esta situación quienes no han desarrollado el hábito de buscar a su familia en Dios ya sea en las reuniones de Zoom o de las reuniones virtuales corren el riesgo de aislarse. Ahorita es bien fácil desconectarnos del grupo y perdernos.
En las redes sociales hay demasiada predicación y enseñanza, todos los predicadores y maestros de la palabra mas famosos se volvieron alcanzables para todos. Nos podríamos congregar con cualquiera de ellos; sin embargo, la Biblia dice que las ovejas han de escuchar y conocer la voz de su pastor, y han de seguirlo.
Esto tiene sentido, porque de alguna forma, cada pastor sabe la jornada espiritual en que se encuentra su rebaño, y la dieta espiritual que requieren; en base a eso va a preparar el alimento y eso es lo que va a compartir.
NO hay nada de malo en que escuches a otros predicadores por internet, pero debes aprender a reconocer la familia espiritual inmediata a la que perteneces, a la que Dios te injertó para que seas intencional y sigas alimentándote de acuerdo a la jornada espiritual en la que venías; y en la que viene el resto de la familia.
Todo lo demás solo será complemento; pero tu alimento fuerte debe venir de lo que te preparan en casa.
Por lo tanto te recomiendo lo siguiente:
1-Determina una hora y un lugar específico para congregarte online con tu familia, y congrégate a esa hora. Determina ese tiempo para congregarte. Y hazlo con intensionalidad y responsabilidad espiritual.
Hay quienes hasta se visten para la oración como cuando se vestían para ir a la iglesia. está bien. NO es obligatorio, pero esta bien.
2-Asegúrate que congregarte es lo único que harás en ese tiempo, para evitar distracciones. No se vale que porque puedes ver la reunión en tu celular, la pongas mientras desayunas, o mientras lavas el carro o mientras vas al baño. No!!!!! que tu tiempo de congregarte sea un tiempo especial para eso.
3-Participa en la alabanza y en la palabra; levanta tus manos, canta, sigue las instrucciones etc.
4-Tómalo en serio y determina tu corazón para recibir la palabra y sobre todo aplicarla a tu vida.
5-Suscríbete a nuestro canal de Youtube: cfal amor y libertad. Para que te avise cuando la reunión esta disponible. Dale like a nuestra pagina de
Facebook. Eso te ayudará a mantenerte vinculado y enterarte de anuncios y mas.
6-Comparte la reunión con todos tus amigos y contactos en redes sociales. De preferencia los que no son cristianos. es una forma de compartir tu vida cristiana y tu fe con otros.
7- Regálanos una foto de como estas disfrutando en familia así: #cfalentuhogar esto importa porque hace que la experiencia sea de ida y vuelta. ver sus fotos también nos nutre a nosotros y nos anima porque nos hace saber que vamos juntos en esto que estamos conectados.
8- Reúnete en zoom con tu grupo en casa, curso, o ministerio.
Fue muy lindo el Domingo pasado ver las fotos de quienes prepararon una mesa para celebrar la comunión con nosotros. fue de bendición
¿Como podemos manteneros conectados con el Espíritu Santo para seguir siendo la fuerza imparable?
Se intencional en mantenerte sirviendo.
Servir es vital para mantenernos vivos espiritualmente. El Apóstol Pablo dijo:
Romanos 6:12-14 12 No reine, pues, el pecado en vuestro cuerpo mortal, de modo que lo obedezcáis en sus concupiscencias; 13 ni tampoco presentéis vuestros miembros al pecado como instrumentos de iniquidad, sino presentaos vosotros mismos a Dios como vivos de entre los muertos, y vuestros miembros a Dios como instrumentos de justicia. 14 Porque el pecado no se enseñoreará de vosotros; pues no estáis bajo la ley, sino bajo la gracia.
Aquí el apóstol Pablo nos enseña a ser intencionales en presentar nuestros miembros, es decir nuestro cuerpo a Dios como instrumentos de justicia. Y que el resultado será que el pecado, no se enseñoreará de nosotros. El Apóstol Pablo nos está dando a entender que es nuestra decisión, donde ponemos a participar nuestro cuerpo, a las cosas de Dios y al pecado.
Servir, nos mantiene vivos espiritualmente y nos mantiene en Santidad. Al servir nos sensibilizamos de las necesidades y eso nos acerca a Dios. Al servir, se fortalece el sentir de dependencia del Espíritu Santo porque
nos hace reconocer lo insuficientes que somos nosotros y nuestros recursos para saciar la necesidad de los demás.
Yo se que ahora mismo, no todos los ministerios están activos como cuando coincidíamos en el edificio, o como cuando asistíamos a lugares como centros de rehabilitación, penitenciaría etc. Pero debemos adaptarnos para seguir sirviendo. Ahora mismo tenemos tres distintas iniciativas por lo menos, en la iglesia de Mazatlán:
1- Hacerle llegar ayuda a los adultos mayores de nuestra iglesia en primer lugar. esta iniciativa la lideran Obed y Mary Carmen.
2- Apoyar a quienes se han quedado sin trabajo. Esta iniciativa la lidera Jorge Almazán
3- Recolectar equipo médico como cubre-bocas, lentes y guantes a los trabajadores de la salud en el Hospital general. Esta iniciativa la lidera Gaby Flores.
Pero hay otros como Ramón bañuelos que se han puesto a disposición de la iglesia para apoyarlos en vueltas, pagos transporte etc. de manera gratuita. eso es servir, comprendiendo el momento específico que estamos viviendo.
Si usted quiere de alguna forma participar en cualquiera de estas iniciativa contactemos vía nuestras redes sociales. Escríbanos un inbox y le haremos entrar encontrado con ellos.
Esta semana Elmer escribía en el grupo de varones, yo aun sigo trabajando y ando en la calle en mi moto, si alguien necesita apoyo con algún pago etc. aquí estoy. ¿Que es eso? Es servir. Eso nos mantiene conectados entre nosotros y con el Espíritu Santo.
Si nos mantenemos buscando a Dios de manera personal, si nos mantenemos conectados con nuestra familia espiritual y si nos mantenemos sirviendo a los demás, seguiremos siendo esa fuerza imparable que Jesús se imaginó que sería su iglesia.
Jesús no se ha detenido. Lucas le dijo a Teófilo:
Lucas 1:1 1 En el primer tratado, oh Teófilo, hablé acerca de todas las cosas que Jesús comenzó a hacer y a enseñar
Jesús comenzó a hacer cosas, pero aún no ha terminado de hacerlas. Ya no las hace mediante su cuerpo físico, ahora las hace mediante su cuerpo místico. Que somos tu y yo.
La iglesia es esa fuerza imparable cuando el Espíritu Santo es el combustible.
Vamos a tomar un momento para buscar al Espíritu Santo cantemos juntos esta canción:
Santo Espíritu.
Jesus dijo:
Mateo 16:18 18 Y yo también te digo, que tú eres Pedro,[a] y sobre esta roca[b] edificaré mi iglesia; y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella.
Eso que dijo es real. el sigue edificando su iglesia. y nada detiene su fuerza imparable: ni Gobiernos, ni movimientos sociales, ni pandemias, ni la falta de edificios o de recursos. Somos una fuerza imparable.
Orar para recibir a Cristo.
